En un proceso judicial siempre habrá una parte con ganancia de causa y otra que sucumbe ante la justicia, quien ha emitido una decisión en beneficio de la primera y en detrimento de la segunda, sin embargo, esta decisión o sentencia para que sus efectos sean plenos deben agotar una fase: la de ser notificada. Sin el cumplimiento de esta formalidad, la parte beneficiada no podría ejecutar lo que le favorece radicando en ello la importancia de la notificación de las sentencia.

La notificación de la sentencia tiene una especial transcendencia porque tiene dos efectos, primero, evitar la caducidad y, segundo, aperturar el plazo para incoar los recursos dispuesto por la normativa dominicana por ejemplo, el recurso de apelación (No. 20, Ter., Feb. 2012, B.J. 1215.).

Es importante a aclarar que el plazo de seis meses no es común de todas las materias o procedimientos debido a que existen plazos excepcionales en la legislación dominicana para procesos específicos, por ejemplo, en el caso de divorcio por causa determinada, una vez obtenida la sentencia y no pronunciada en el termino de dos meses luego del vencimiento del plazo de apelación, la misma se considera como caducada según el artículo 19, de la Ley núm. 13-06 Bis, «y no podrá obtener otra sentencia sino por una causa nueva, a la cual, sin embargo, podrá agregar las antiguas causas.»

¿Qué hacer si caduco el plazo para notificar una sentencia?

En caso de perención o caducidad de la sentencia, se debe iniciar nuevamente la instancia con la notificación del emplazamiento primitivo.

Igualmente, una vez notificada la sentencia comienza a correr el plazo para la interposición de los recursos que correspondan. Por ejemplo, en materia civil, el plazo de apelación es de un mes.