Modelo de utilidad
Un modelo de utilidad es un título que reconoce el derecho de explotar en exclusiva una invención, impidiendo a otros su fabricación, venta o utilización sin consentimiento del titular. Como contrapartida, el Modelo de Utilidad se pone a disposición del público para general conocimiento. De acuerdo con la Oficina Nacional de la Propiedad Industrial (ONAPI) un modelo de utilidad es cualquier nueva forma, configuración o disposición de elementos de algún artefacto, herramienta, instrumento, mecanismo u otro objeto, o de alguna parte del mismo, que permita un mejor o diferente funcionamiento, utilización o fabricación del objeto que lo incorpora, o que le proporcione alguna utilidad, ventaja o efecto técnico que antes no tenía.
El derecho otorgado por un modelo de uutilidad no es tanto el de la fabricación, el ofrecimiento en el mercado y la utilización del objeto del modelo sino, sobre todo y singularmente, «el derecho de excluir a otros» de la fabricación, utilización o introducción del producto protegido en el comercio.
El alcance de la protección de un Modelo de Utilidad es similar al conferido por la Patente. Sin embargo, a diferencia de las patentes, no podrán protegerse como Modelos de Utilidad las invenciones de procedimiento, las que recaigan sobre materia biológica y las sustancias y composiciones farmacéuticas (el resto de sustancias y composiciones químicas sí podrán acogerse a esta modalidad de protección).
La duración del Modelo de Utilidad es de diez años desde la presentación de la solicitud. Para el mantenimiento del derecho es preciso el pago de tasas anuales.
Importancia de los modelos de utilidad
Los modelos de utilidad se consideran “invenciones menores” al aportar un nivel de creatividad e innovación menor que el que requeriría obtener un derecho de patente. La principal diferencia con una patente está, por tanto, en que para obtener un modelo de utilidad la exigencia de novedad de la invención es menor y el análisis comparativo se realiza a nivel nacional; para una patente, además de una mayor exigencia, la invención se evalúa a nivel mundial.
El alcance de la protección que otorga un modelo de utilidad es parecido al de una patente, pero su duración es inferior (10 años desde que se presenta la solicitud, frente a los 20 que puede proteger una patente), las tasas que se cobran suelen ser menores y hay materias para las que no se permite esta protección.
La Ley excluye de la protección como modelo de utilidad aquello que según la norma no sea considerado invención y, en todo caso:
- Todo aquello que no sea patentable, como es el caso de los procedimientos de clonación de seres humanos o la utilización de embriones con fines industriales o comerciales.
- Las invenciones de procedimiento.
- Las que afecten a materia biológica y sustancias y composiciones farmacéuticas.
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